
Es muy común pensar en ganar más dinero para acumular más riquezas y comprar más. Esto es un error que debemos corregir para alcanzar la estabilidad financiera que tanto anhelamos.
Para lograr este objetivo empecemos por aclarar algo importante: incrementar las ganancias no es generar riquezas. Son conceptos semejantes pero generar riquezas incluye poder ahorrar e invertir.
Por ejemplo, si ganas 1000 €/$ o más al mes porque tienes un extra por comisiones o simplemente trabajas más horas, este importe es incrementar las ganancias. Pero, a pesar de ello, no logras llegar a fin de mes porque no te alcanza el dinero, entonces no eres más rico porque no estás generando riquezas.
Este problema lo tenemos solamente porque no estamos educados financieramente para eliminar los hábitos de pobreza que afectan independientemente de las ganancias obtenidas.
La educación financiera se refiere a la correcta administración de tu dinero. Algo tan sencillo como: generar diferentes fuentes de ingresos, dividir tus cuentas bancarias e invertir en tu mente.
Generar diferentes fuentes de ingresos es el extra o variable que ganamos de más en esas horas trabajadas en la misma empresa o doble salario por trabajar en una diferente. Este plus mensual deberíamos transferirlo o depositarlo en una cuenta bancaria distinta a la habitual, para poder convertirlo en riqueza mediante los planes de ahorro o inversión.
Invertir en uno mismo es la mejor forma de llenar los bolsillos y alcanzar tu estabilidad financiera. Cambiar tu mente y hábitos de pobreza te permite mejorar el enfoque y perspectivas en tus proyectos de vida porque ganar más dinero no es ser más rico.